Canciones cristianas | El Dios encarnado hace la obra de salvación silenciosamente
Dios se hace carne, se esconde entre la humanidad
para hacer la nueva obra, salvarnos de la corrupción.
Él no da explicaciones.
Por los planes que ha hecho, Su obra hace paso a paso.
I
Sus palabras aumentan día a día,
consuelan, recuerdan, reprueban y advierten.
De gentiles y amables a temibles y sublimes,
Sus palabras infunden compasión y miedo.
Lo que Él dice revela nuestros profundos secretos.
Sus palabras pueden lastimar y avergonzarnos.
Hay una infinita provisión de Su agua viva.
Y gracias a Él, vivimos con Dios cara a cara.
Dios se hace carne, se esconde entre la humanidad
para hacer la nueva obra, salvarnos de la corrupción.
Él no da explicaciones.
Por los planes que ha hecho, Su obra hace paso a paso.
II
El poder de la vida en Sus palabras,
nos muestra el camino y cuál es la verdad.
Atraídos por Su palabra, percibimos el tono y voz de Su corazón.
Él se esfuerza al máximo y derrama Su sangre.
Por nosotros suspira y llora de dolor,
sufre vergüenza por nuestro destino y salvación.
Por nuestra rebeldía, Su corazón llora y sangra.
Nadie puede alcanzar tal ser y Sus posesiones.
Ni igualar Su tolerancia.
No hay creación que haya tenido el amor y la paciencia que Él tiene.
Dios se hace carne, se esconde entre la humanidad
para hacer la nueva obra, salvarnos de la corrupción.
Él no da explicaciones.
Por los planes que ha hecho, Su obra hace, hace Su obra.
Sí, Su obra hace paso a paso.
De “La Palabra manifestada en carne”
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